LO FEMENINO COMO MITO EN GALDOSII

Pilar Concejo

A través de su obra literaria Galdós va

soñando en una sociedad nueva a la vez que denuncia la sociedad que le tocó vivir. El anhelo

de reforma social lo entreteje a través de sus personajes y muy especialmente de sus

personajes femeninos.

Como Cervantes, funde y contrasta constantemente el mundo de la realidad con el mundo

de ficción. Galdós eleva la realidad al plano estético y el vivir cotidiano constituye la materia

esencial de su creación novelística 1•

En su novela Tormento nos presenta un grupo de personas en constante relación unas

con otras y con el medio ambiente en que se hallan colocadas. Nos ofrece una visión de la

realidad de una época, de un espacio y de un sector social determinados. En nuestro trabajo

nos vamos a centrar en los personajes femeninos de la novela: Rosalia Bringas, Amparo y

Refugio Sánchez Emperador. Nos preguntamos ¿cuál es la postura de Galdós respecto a la

mujer? ¿Cuál es el pensamiento galdosiano sobre ella?

Partimos del hecho de que el escritor a la hora de escribir sobre la mujer lo que nos ofrece

es la imagen que él tiene de ella (o la que le gustaría tener) porque cuando un escritor trata

de hacer realismo sólo expresa su propia realidad. No nos hallamos ante un documento social

sino ante una obra de arte en la que la realidad expresada refleja un modo de hacer pero no

el mundo objetivo. Los textos literarios han reforzado, en general, la condición de la mujer.

La Literatura ha servido para señalarle su puesto en la sociedad jerarquizada hecha por los

hombres y para los hombres. En un primer momento, los personajes femeninos galdosianos

son personificaciones de ideas; más tarde, estudia a través de ellos el carácter nacional

ofreciendo a los españoles una imagen bastante fiel de sí mismos. Después, los personajes

serán simbólicos. En todos los casos, los personajes más que vivir en un ambiente, lo crean.

Gran admirador de la mujer, Galdós subraya el papel esencial de ésta como núcleo

fundamental de la nueva sociedad y como elemento moderador.

A través de sus personajes femeninos, se cuestiona la ideología de la sociedad burguesa;

critica, ironiza y parodia la moral convencional y la mentira reinante. Galdós quiere despertar

a sus contemporáneos para que reemplacen sus delirios de grandeza por el trabajo paciente

_ BIBLIOTECA GALDOSIANA

y pasen del mundo del ensueño al mundo de la realidad. El ejemplo parece encontrarlo en

la mujer.

En Tormento, percibimos un diseño triangular. El número tres preside el relato. La novela

se enmarca entre tres escenas dialogadas. En la primera, Ido del Sagrario se nos presenta

como novelista. Está escribiendo una novela sobre dos niñas huérfanas y muy pobres pero

que son ejemplo de honestidad y laboriosidad.

Mis heroinas, le dice a Felipe, tienen los dedos pelados de tanto coser, y mientras más

les aprieta el hambre, más se encastillan ellas en su virtud2•

A través del diálogo, Ido identificará a estas niñas con las señoritas Amparo y Refugio,

sus vecinas, las niñas de Sánchez Emperador. "Si vivimos en la misma casa: Beatas, cuatro;

yo, tercero; ellas, cuarto" (p. 13). Realismo frente a imaginación. Y concluye Ido: "Yo escribo

maravillas; la realidad me las plagia".

En la segunda escena, Ido piensa en un final "poético" para su novela pero Centeno le

desengaña: "No sea memo, le dice. Todo sucede al revés de lo que se piensa" , a lo que contesta

Ido vanidosamente "Lo que es a mí, chico, la realidad me da siempre la razón" (p. 246). La

realidad como ficción y la ficción como realidad.

La tercera escena cierra la novela y tiene lugar entre Rosalia Bringas y su marido. Este

le cuenta una mentira mientras que ella se queja y escandaliza de que Agustín haya

marchado con Amparo sin estar casados.

En la estructura de la novela nos encontramos con una ficción dentro de la ficción, y con

tres voces narrativas: la de Ido, la del autor y la del narrador, que es a la vez personaje y

testigo. Germán Gullón subraya que el narrador informa sobre los acontecimientos desde

dentro, Ido informa desde el medio, y el autor desde fuera. El autor presenta la acción

principal como si estuviera sucediendo en el momento de contarla utilizando los diálogos

mencionados anteriorment&.

Ido imagina su novela partiendo de datos de la realidad y reconoce que ésta "inventa

también cosas que no nos atrevemos ni a soñar los que tenemos tres cabezas en una" (p. 14).

De acuerdo con la invención de Ido, las dos hermanas, Amparo y Refugio, son ejemplo

de honradez porque ganan la vida cosiendo y haciendo flores. Pero la historia de las dos

hermanas es otra, y está lejos de lo que es la realidad en sí y que Galdós va a reproducir con

exactitud. Junto a lo que la realidad es y lo que parece ser, está la sociedad nueva soñada por

Galdós, la que le gustaría que fuera. Es un posible significado de tener "tres cabazas en una" .

Siguiendo con el diseño triangular, tenemos que subrayar que son tres los personajes

femeninos importantes (Rosalia, Amparo y Refugio), tres los marcos espaciales (la casa de

los Bringas, la de Refugio y la de Pedro Polo), y tres las fuerzas que mueven la narración y

el comportamiento de los personajes (las circunstancias, los principios y los hechos). Los

amigos que van a casa de Caballero son tres: Arnaíz, Trujillo y Mompou (p. 76). En la casa

tiene un armario con tres espejos (p. 74). Amparo es para Pedro Polo, Tormento, Patíbulo

e Inquisición (p. 155). Un baile de palacio desnivela a la familia Bringas por tres meses, ... etc.

y tres son los géneros que componen la intertextualidad de la novela: los diálogos, el

discurso narrativo y las cartas.

N CONGRESO GALDOSIANO _

Tres son las cartas que se introducen en el discurso narrativo en las que se concentra gran

parte de la crítica social galdosiana.

En una, Pedro Polo escribe a Amparo desde su estado de regeneración al contacto con

la Naturaleza. Aprovecha Galdós para enfrentar Sociedad y Naturaleza, autenticidad natural

y mentira social:

Hombres no se ven ahora por aquí. Los de este lugar, con su sencillez ingenua, son

lección viva y permanente de la superioridad de la Naturaleza sobre todo. Malditos los

que en el laberinto artificioso de las sociedades han derrocado la Naturaleza para poner

en su lugar la pedantería, y han fundado la ciudadela de la mentira sobre un montón

de libros amazacotados de sandeces. (p. 156).

En otra, los celos del cura Pedro Polo se desatan al enterarse que Amparo se va a casar

con otro hombre. "Enterarme, perder todo lo que había ganado en salud yen juicio, fue una

misma cosa ... Todo lo olvidé y ... me vine a Madrid, donde estoy dispuesto a hacer todas las

barbaridades posibles". (p. 177).

La tercera carta está escrita por Agustín Caballero a un primo indiano dándole~uenta de

un gran acontecimiento; se ha enamorado de una mujer pobre. Contrasta aquí, belleza y

virtud, hace una crítica severa a la educación de la mujer española, que según él es nula.

Mujeres guapas hay; pero muchas se blanquean con cualquier droga, comen mal y están

todas pálidas y medio tísicas ... No saben hacer una sopas, ni pegar un triste botón, ni

sumar dos cantidades ... (p. 134)

Junto a estas tres cartas podríamos mencionar aquí la nota que escribe Amparo a lápiz

antes de intentar suicidarse y que deja sobre el gabinete de Caballero. La frase "No merezco

. perdón sino lástima" encierra una profunda crítica social.

Analicemos ahora los tres personajes femeninos más importantes en la novela y veamos

cómo nos los describe Galdós y qué nos transmite a través de ellos.

Rosalía Bringas

Del triángulo femenino, Rosalia es el personaje peor tratado por Galdós4• Es la "mujer

fantasma", que lo espera todo de vivir bien relacionada. Es la "mujer social" presuntuosa,

que necesita hacer gala de unos signos externos para vivir integrada socialmente. "Los

Bringas son ricos de buena voluntad nada más" (p. 39), pero no se privan de asistir a los

bailes de Palacio, al teatro y a las tertulias. Afán frenético de aparentar un lujo en que no

vive. Es la mujer objeto, capaz de venderse a cualquiera con tal de conseguir dinero para

satisfacer su manía de trapos y su afán de lujo. Es víctima sí, de una mala educación y de

una sociedad dominada por prejuicios en la que la iniciativa individual es sustituida por la

fe en las recomendaciones Rosalia es una mujer orgullosa, que vive pendiente del qué dirán.

Bajo la apariencia de proteger a su pariente Amparo, lo que hace es utilizarla como criada

mal pagada y usarla para satisfacer sus aires autoritarios5• Hipócrita, utiliza el halago y el

_ BIBLIOTECA GALDOSIANA

cariño con Agustín para sacarle dinero. Teme los comentarios y la pérdida de imagen social,

primero, cuando se entera del pasado vergonzoso de Amparo con el cura Pedro Polo y más

tarde cuando se entera de que Agustín se ha ido con Amparo sin estar casados. Es una

inmoralidad y una ignominia para la familia tan honrada y ejemplar como la suya.

"Volverán ... -dice-, Aquí la quiero tener, aquí. .. Sanguijuela de aquel bendito, nos veremos

las caras" (p. 253). La ironía de Galdós se hace sarcástica cuando pocas páginas más tarde,

en la novela La de Bringas, Rosalia comete adulterio por dinero, que es una de las más

grandes indignidades.

Rosalia Bringas encarna la frivolidad, la inautenticidad y la intransigencia, todos ellos,

aspectos negativos de la sociedad española de finales del XIX. En este personaje, Galdós

denuncia toda una clase social que vive hacia el exterior sin darse cuenta que con ello está

labrando su propia destrucción y la desgracia de quienes les rodean. Denuncia también, la

incapacidad para asumir positivamente la propia posición social, adoptando una frívola

moral de las apariencias y del quiero pero no puedo. Pero Rosalia no engaña a nadie con su

barniz de aristócrata.

Amparo

Es el personaje femenino más desarrollado en la novela. Huérfana y pobre, tiene muy

pocos recursos para integrarse socialmente. El matrimonio era la meta máxima en la vida

de toda mujer, pero existía también la posibilidad del convento.

El convento era refugio para las..menos afortunadas y las poco agraciadas. Esto explica

el que Rosalia Bringas tenga la idea felicísima de que Amparo debe meterse monja. "Con tu

carácter y tus pocas ganas de novios, tú no has de casarte, Y sobre todo, no te has de casar bien", le dice.

El matrimonio era recurso más atractivo. Si se poseía fortuna o rango, era más fácil pero

había menos posibilidades de escapar a un matrimonio de conveniencia. La lucha por la

emancipación personal de la mujer era difícil. Recordemos que Ana Ozores se plantea su

situación así:

Quería emanciparse; pero ¿cómo? Ella no podía ganarse la vida trabajando; antes la

hubiesen asesinado los Ozores; no había manera decorosa de salir de allí a no ser el

matrimonio o el convent06

Amparo, nuestra protagonista, que teme que la idea del convento salga adelante, se

desahoga con su interlocutor Agustín Caballero:

Ay, don Agustín, dichoso el que es dueño de sí mismo, como Vd. En que condición tan

triste estamos las pobres mujeres que no tenemos padres ni medios de ganar la vida,

ni familia que nos ampare, ni seguridad de cosa alguna como no sea de que al fin, al

fin, habrá un hoyo para enterrarnos ... (p. 54).

Para Caballero, es un disparate que se haga monja porque "Vsted es pobre, le dice, pero

de altas, de altísimas prendas ... Está llamada a un destino mejor" (p. 54).

IV CONGRESO GALDOSIANO _

Amparo es la mujer víctima. Es víctima de la sociedad de su tiempo en la que la mujer

ocupa un lugar secundario y pasivo. Su condición de mujer socialmente desamparada

favorecerá a que Pedro Polo descargue en ella la represión sexual largamente contenida, y

a que su parienta Rosalia use y abuse de ella para alimentar su carácter autoritario.

Tres nombres se emplean en la novela para referirse a Amparo: Amparito, Tormento y

la Emperadora. El primero hace referencia a la huérfana pobre, de carácter débil e indecisa

que le gusta la tranquilidad, el orden, el ver poca gente y trabajar.

Amparo encarna en la novela el desamparo, que a su vez es expresión del desamparo y

la vejación de España.

El nombre de "Tormento" se refiere a Amparo como amante del cura Pedro Polo. Es la

"antigua herida" que le produce dolor y que intenta suavizar con remedios sacados de su

imaginación como el que se va a tierra de misión a evangelizar cafres. (p. 61). Siente hacia

él una mezcla extraña de horror y respeto, de lástima y repugnancia (p. 104). Quisiera borrar

esta experiencia de su vida pero vive atormentada por el recuerdo.

El tormento se vive en la novela en un diseño también triangular. Amparo es causa de

éste para Pedro Polo y Caballero, pero a la vez lo sufre en su interior como sujeto paciente.

Dos fuerzas luchan entre sí: el amor a Caballero con quien va a casarse y el temor a Pedro

Polo, que cual "bestia herida" brama ante la resistencia de Amparo. "Soy un muñeco indigno

forrado en la musculatura de un Hercules", se dice a sí mismo. Paralelamente y por contraste,

la cordera- Amparo tomaba aspecto de leona ante él y es capaz de decirle:

Yo soy cristiana, yo se lo que es el arrepentimiento, se morirme de pena, deshonrada,

antes que caer en el lodazal adonde quieres arrastrarme (p. 192).

Luchan en Amparo la fuerza del arrepentimiento y el peso de la deshonra social. Tendrá

que escoger entre darse la muerte o soportar la ignominia, que pronto la cubriría como una

lepra moral incurable y asquerosa" (p. 190). Amparo se siente utilizada por unos y engañada

por otros por eso ante la presión moral que se ejerce sobre ella, llega a pensar como única

salida, en cometer suicidio.

El nombre de Emperadora se le da a Amparo en su relación con el rico indiano Agustín

Caballero, quien la eleva de sirvienta a señora y dueña de su imperio. Amparo es la mujer

ideal que Caballero se había forjado. "No tiene ambición de lujo sino de decencia" (p. 130);

"poseía un corazón inclinado a todo lo bueno y grande amor al trabajo" (p. 158); "Es un angel

de hermosura y bondad" (p. 166); "es una joya" (p. 134). Más tarde, Amparo será la espina

que se le ha clavado en el corazón y no puede arrancársela (p. 228), y la manzana que parecía

buena y que el abrirse se ve dañada".

Atormentado en su interior por saber la verdad, Agustín se pregunta: ¿Qué voz escucharé

de las que suenan en mi alma? ¿La que dice: mátala, a la que dice, perdónala? (p. 234).

Frustrado de una sociedad en la que'reina la mentira decide perdonarla. "Me da la gana de

perdonarla, señora sociedad. Si es culpable y está arrepentida la perdonaré, señora sociedad

de mil demonios y me la paso a vd por las narices". (p. 235).

Amparo como mujer, sufre la humillación de Rosalia, los celos de Pedro Polo ante el

peligro de que su antigua amante vaya a pertenecer a otro hombre, y la desilusión de Agustín

_ BIBLIOTECA GALDOSIANA

Caballero para quien su idealidad de mujer se transforma en una mujer de carne

y hueso.

Como novia, Amparo vive atormentada por el recuerdo; vive el tormento de la angustia

y el sobresalto; "llegó a gran extremo la susceptibilidad de la Emperadora", comenta el

narrador. Decide quitarse la vida, pero no quiere morir sin antes poder decir a Caballero "No

soy tan mala como parece" (p. 212). En la nota que le deja sobre su gabinete escribe: "Todo

es verdad. No merezco perdón sino lástima" (p. 237).

Agustín, que vive en el presente desde el ayer, termina perdonándola y juntos parten para

Francia, mientras el narrador omnisciente comenta: "Un tren que parte es la cosa del mundo

más semejante a un libro que se acaba. Cuando los trenes vuelvan, abrios, páginas nuevas"

(p. 251).

Ido, que en el primer diálogo hablaba de "virtud triunfante" ahora refiriéndose a Amparo

nos dice "que grande ha sido su falta" (p. 245). La casa de las hermanas descrita como "una

tacita de plata" , ahora se transforma en "lupanar". La única solución para la regeneración

de Amparo es que se haga hermana de la Caridad y se dedique a cuidar enfermos en hospitales

y campamentos. Ya tiene título para su novela, "Del lupanar al claustro". Galdós, en cambio,

parece defender la posibilidad de una relación amistosa entre hombre y mujer y una posible

independencia femenina por encima y a pesar de la presión social y de los convencionalismos

sociales y morales.

Rifugio

Es la hermana menor de Amparo. De carácter "algo bravío", ama la independencia y no

se conforma con su destino de víctima pasiva. No sufre las humillaciones de su parienta la

de Bringas y reacciona contra su infortunado destino con decisión. Se va de la casa de los

Bringas para elegir su propio camino en la vida. Refugio es la "mujer pública" y rebelde, que

no deforma la realidad sino que la acepta y que no se avergüenza de vivir de la prostitución.

A su hermana Amparo le dice:

y si quieres que te hable clarito, no me gusta que me mandes como si yo fuera una

chiquilla. ¿Soy yo mala? No. Me preguntas que cómo he comprado las botas y he

arreglado mi vestido. Pues te lo diré. Estoy sirviendo de modelo a tres pintores ...

Modelo vestido, se entiende. Gano mi dinero honradamente ... (p. 69).

Es la mujer con voluntad de trabajo y de superación. Para ganarse la vida y poder comer

hace "locurillas" y tiene "genialidades" pero en el fondo, Refugio es una mujer buena.

Cuando su hermana le dice que era novia del rico indiano Agustín Caballero y que se iba a

casar con ella, y que les convenía a ambas hacerse dignas de la fortuna que Dios les deparaba,

comienza a estar muy razonable y sumisa. Amparo, con innata filosofía, comenta para sí:

La honradez depende de los medios de poderla conservar. Ha bastado que yo le diga a

esta loca: "tendremos que comer". para que empiece a corregirse. (p. 163)

IV CONGRESO GALDOSIANO _

Refugio es la mujer sincera que no deforma la realidad sino que la percibe como es.

Enérgica y desordenada, no piensa más que en componerse. En el retrato que Gadós nos da

de ella subraya aparentemente lo fisico: Su cuerpo va tan fajado y ceñido que parece hecho

a torno (p. 69). El pelo era lo mejor de su persona y lo más llamativo en ella, su seno, harto

abultado y sin guardar proporciones con su talle y estatura. Semejante a la venus Calipije

(p. 65). Para Amparo, su hermana es un peligro constante por su indiscreción. Teme que

hable en presencia de Agustín Caballero y de a conocer con una palabra la diferencia que

existía entre ella y una señorita decente (p. 161). Al "compórtate" de Amparo, Refugio

responde: "yo no soy hipócrita"; es decir, muestro lo que soy sin ocultar nada,

quedando implícito que su hermana lo es, y que sabe su secreto, sus amoríos con

Pedro Polo.

Las dos heroinas se critican entre sí pero se complementan. Si la hermana mayor protege,

la pequeña es el "refugio" donde, Amparo puede encontrar libertad, sinceridad y verdad.

Refugio es el personaje favorito de Galdós en quien encarna sus anhelos de cambio y de

reforma. Defiende en ella el derecho de la mujer a realizarse y ser libre. El pensamiento de

Galdós sobre la mujer parece favorable a su causa emancipadora.

La novela Tormento es una denuncia de ese mundo de sueños falsos e imposibles en que

los personajes fingen ser lo que no son. Denuncia a una sociedad en la que la mentira ha

sustituido a la sinceridad y el egoismo a la generosidad. Critica el parasitismo reinante: "Los

de Bringas iban al teatro de limosna" (p. 48), Y la tal obligación de asistir al teatro, que solo

existe en Madrid, "pueblo callejero, vicioso, que tiene la industria de fabricar tiempo" (p.

159). Critica a la gente latina "que sacrifica su bienestar a vanas apariencias" (p. 132), Y la

situación de la mujer de la clase media, ignorante, superficial y frívola, incapaz de ser

autosuficiente en cualquier faceta de la vida. Buen ejemplo es la carta que Agustín escribe

a un amigo de tierras americanas:

Querido Claudio, pongo en tu conocimiento que el señorio de esta tierra me revienta.

Las niñas éstas, cuanto más pobres, más soberbias. Su educación es nula: son

charlatanas, gastadoras y no piensan más que en divertirse y en ponerse perifollos.

En los teatros ves damas que parecen duquesas y resulta que son esposas de tristes

empleados que no ganan para zapatos ...

Las pollas no saben hablar más que de noviazgos, de pollos, de trajes, del tenor H, del

baile x, de albunes y de la última moda de sombreros ... (p. 133).

La cita muestra bien como la mujer en el s. XIX era educada para ser un objeto útil y

agradable para la vida de los hombres. Ignorante e incapaz de pensar, está siempre dispuesta

a obedecer. La mujer que se atreve a hacer algo no admitido socialmente es castigada, y la

resignada es premiada.

Galdós cree en la capacidad de la mujer para regenerarse y quedar integrada dentro de

un orden que incluye la materia y el espíritu. A través de los tres personajes femeninos que

hemos estudiado parece plantear al lector el problema del relativismo moral. Arremete

contra la hipócrita Rosalía y defiende a Amparo y Refugio. Parece favorecer de manera

especial a ésta, considerándola la menos inmoral de las tres porque es la más sincera y la

que más cómoda se siente consigo misma. Quizás por esto, Refugio es elegida para ser el

_ BIBLIOTECA GALDOSIANA

ángel castigador de su antigua parienta Rosalia Bringas, cuando ésta le pide dinero para

poder salir de unos apuros económicos ocasionados por ella misma:

,

Ay, que Madrid este, todo apariencia. Dice un caballero que yo conozco, que esto es un

carnaval de todos los días, en que los pobres se visten de ricos. Conozco señoras de

empleados que estan cesantes la mitad del año, y da gusto verlas tan guapetonas.

Parecen duquesas y los niños principitos. ¿Cómo es eso? Yo no lo sé.

Dice un caballero que yo conozco, que de esos misterios está lleno Madrid. Muchas no

comen para poder vestirse, pero algunas se las arreglan de otro modo ... Grandísimas ...

Yo no engaño a nadie; yo vivo de mi trabajo. Pero vosotras engañáis a medio mundo

y quereis hacer vestidos de seda con el pan del pobre.

Notemos que la novela se abre con disfraces y termina con una mentira. El engaño parece

envolverlo todo pero será el lector quien integre éstos y todos los demás elementos de la

novela para darles sentido. El lector será el que de sentido de forma definitiva a la novela.

Desde esta perspectiva de lector crítico nos preguntamos. ¿Cuál es pues la intencionalidad

del diseño triangular dominante? ¿Cuál es la "mujer nueva" para la sociedad nueva soñada

por Galdós? La mujer ideal aparece como un deseo, y en esa mujer nueva combina

características de la mujer natural (Amparo) y de la mujer rebelde (Refugio); sinceridad,

energía, amor al trabajo, capacidad de amar y deseo de cambio y reforma.

Galdós denuncia la mentira y el machismo de una sociedad hipócrita que hace

deliberadamente de la mujer un ser inferior.

Para él, la mujer es elemento esencial en la regeneración de la vieja sociedad y en la

construcción de la nueva.

N CONGRESO GALDOSIANO _

Notas

t Véase para este tema las obras de Gustavo Correa, Realidad, Ficcióny Símbolo en las novelas

de PérezGaldós. Madrid: Gredos, 1977, la de Ricardo Gullón, Técnicas de Galdós. Madrid: Taurus, 1980,

y la de Stephen Gilman, Galdósyel arte de la novela europea. Madrid: Taurus, 1985.

2 Benito Pérez Galdós, Tormento. Madrid: Alianza Editorial, 1968, p. 28. Todas las citas que se den

de esta novela se indicarán dando el número de la página a continuación.

3 Germán Gullón, El na"ador en la novela del siglo XX. Madrid: Taurus, 1976, p. 110.

1 Sobre los personajes femeninos hemos consultado las obras de Daria J. Montero Paulson, La

jerarquíaJemenina en la obra de Galdós. Madrid: Edit. Pliegos, 1988, y la de Marie Claire Petit, Les

PersonnagesJeminines dans les Romans de Benito Pérez Galdós. Paris: Biblioteque de la Faculté de

Lettres de Lyon, 1972.

s Sobre el lenguaje de Galdós, consultar la obra de D. F. Urey, Galdós and the Irony qf Language.

Cambridge, University Press, 1982, y el trabajo de Emma Martinell Gifre, "Formas imperativas de la

caracterización lingüística de Rosalia de Bringas en Tormento", en Actas del Tercer congreso

Internacional de Estudios Galdosianos, Edic. Cabildo Insular de Gran Canaria, 1989, p. 251 Y ss.

6 Leopoldo Alas Clarín, La Regenta. Madrid: Espasa-Calpe, 1984, p. 203. Se pueden consultar

además los artículos deMi Pilar Benito, "Los Estados Civiles de la mujer en el s. XVIII a través de los textos

literarios", y el de Estrella de Diego, "Prototipos y antiprototipos de comportamiento femenino a través

de las escritoras españolas del último tercio del s. XIX", en Literaturay Vida Cotidiana. Universidad

Autónoma de Madrid, 1987.