APROXIMACIÓN HISTÓRICA •
A LA QUINTA SERIE
DE LOS BPISODIOS NACIONALBS
Isabel Calvo GiL Pe re Cano i Ferri, Gemma Centelles Royo
M. a Angeles Muñoz Dols, Carme Ortells Pertegas
Miquel Angel Badenes Martín
1. INTRODUCCIÓN
La presente comunicaCIon analiza la quinta serie de los Episodios
Nacionales de Benito Pérez Galdós, que comprende el período histórico
1868-1874. Nuestro objetivo fundamental es realizar una lectura prioritariamente
histórica a partir de esos materiales galdosianos.
¿Qué vigencia histórica puede tener Galdós en nuestros días? ¿Qué
análisis hace como contemporáneo de unos hechos históricos que podemos
juzgar en la actualidad? ¿Qué conexión hay entre la Novela y la
Historia?
Teniendo en cuenta la variedad formal de los Episodios, hemos tomado
como hilo conductor los siguientes temas:
- La opinión que Galdós tiene sobre la revolución del 68.
- El análisis que hace de la vida política, sus partidos y sus personalidades.
- Cómo analiza la cuestión social desde su perspectiva de hombre
de clase media.
- La cuestión religiosa desde su anticlericalismo radical.
El estudio de estos aspectos a través de sus novelas nos permite hacer
algunas reflexiones sobre la visión histórica que tiene Galdós como
contemporáneo de unos hechos, vista desde nuestra perspectiva actual.
En definitiva, tratamos de ver la conexión entre la Novela y la Historia,
aprovechando la frescura que aporta la primera sin obviar las contradicciones
y críticas que podemos hacer desde la segunda.
11. ANÁLISIS HISTÓRICO DE LA QUINTA SERIE
Historiográficamente se considera el periodo 1868-74 como una unidad:
el llamado "Sexenio Revolucionario». Una unidad compleja, puesto
que abarca hechos tan dispares como la Revolución del 68, el Reinado
de Amadeo I y la I República, hasta la Restauración alfonsina.
_ BIBLIOTECA GALDOSIANA
Indudablemente, un contemporáneo de los hechos no pudo verlo
como un único período. Aunque Galdós los agrupa en una seríe, la quinta,
el tratamiento de los distintos episodios demuestra su especificidad.
Tanto en los protagonistas como en la trama literaria, en la diversidad de
estilos, en la diferente presentación de los hechos históricos, en la postura
implícita de Galdós, cada novela presenta unas características diferentes,
al contrarío de lo observado en las series anteríores.
AsÍ, el período comenzaría en una novela de la cuarta serie, La de los
tristes destinos. España sin Rey y España Trágica serían novelas de transición.
La prímera, aislada, en la cual el tratamiento es el de una novela
por entregas con el trasfondo del período de la interinidad; y la otra,
España Trágica, en la que se retorna a protagonistas de las anteriores
novelas (Vicente Halconero, el hijo de LucHa) yen la que la historia personal
y la historia real son paralelas, pero sin continuidad.
Los últimos tres episodios ya retoman el hilo de la vida de un protagonista,
"alter ego .. de Pérez Galdós, Tito Liviano. Además, enfoca el argumento
de la novela hacia el objetivo de narrar hechos históricos: todo
en la vida de Tito Liviano está encaminado a mantenerlo presente en los
acontecimientos que el autor juzga relevantes. La lfistoria, asimismo, es
omnipresente: Clío aparece en todo momento y en todo lugar.
11.1. La interpretación galdosiana sobre la Revolución del 68
La interpretación acerca de la Revolución es clara: fue un pronunciamiento
que triunfó y no una auténtica revolución, entendiendo que el
objetivo fundamental de los promotores del movimiento fue únicamente
un cambio político: "Habíamos hecho una revolución con el instrumento
naval y militar, trayendo después al pueblo a que la confirmara .. l.
Desaparecidas las figuras que iniciaron el proceso, el movimiento languidece
durante el reinado de Amadeo I y dará un cambio radical durante
la I República, apartándose de los ideales septembrinos.
La claridad de este juicio histórico 2 demuestra que Galdós tenía una
idea más avanzada del concepto "revolución .. que sus contemporáneos.
No basta con un cambio político, es necesario un cambio social y económico.
AsÍ, el "carácter revolucionaría .. viene dado por la ideología democrática
que defiende la Gloriosa. Una ideología extranjera, según Galdós,
extraña a la nación española, mal utilizada y, por si fuera poco, tergiversada
por unos líderes que no desean en absoluto una revolución burguesa
real. Ello llevará a la instauración de un régimen de libertades ficticias
1 PtREZ GALDÓS, Benito, España sin rey, Madrid, Alianza Hernando, 1980, pág. 9.
2 Hay un acuerdo absoluto acerca de esta interpretación. Como ejemplos se puede
ver TuÑÓN DE LARA, Manuel, Estudios sobre el siglo XIX español, Madrid, Siglo XXI, 1972,
pág. 91; LóPEZ CORDÓN, M.a Victoria, La Revolución de 1868 y la l.a República, Madrid, Siglo
XXI, 1976, pág. 12.
V CONGRESO GALDOSIANO _
que producen la confusión entre los ideales políticos y la realidad histórica:
por una parte, facilitan el resurgimiento de movimientos absolutistas
y retrógrados como el carlismo; por otra, aparecen con fuerza
movimientos radicales y prematuros como el federalismo. Mientras tanto,
la inercia del mantenimiento de las mismas actuaciones políticas que
en el pasado, hace que permanezca una clase de políticos profesionales
que controlan los resortes del podee y que se reproduzca la imagen de
cesantes, burócratas, poltronas, caciquismo, etc. Esta situación acabará
por desvirtuar el escaso sentido democrático que defendió la revolución
septembrina.
Todo ello, y la falta de un «gran hombre» que tome las riendas y reconduzca
el proceso, producirá el fracaso de la revolución, demostrado
en la vuelta a los «tiempos bobos» que significa la Restauración.
La frustración de Galdós, que se definió a sí mismo como «hijo del
68» 3, ante este fracaso será determinante en su vida y en su obra posterioe
tal como manifiestan la mayoría de sus estudiosos.
11.2. La cuestión política
A lo largo de la quinta serie, el problema político fundamental es el
de la organización del Estado: Monarquía o República y la articulación de
la vida política en torno a estas opciones. ¿Qué Monarquía?, ¿qué República?,
y el grave problema de la interinidad. En este sentido carlismo y
republicanismo absorben la atención del autor. Otras opciones monárquicas
(Montpensier y Amadeo) surgen de forma coyuntural. como lo fue su
realidad histórica. El tratamiento de la tendencia alfonsina se centrará en
la figura de Cánovas.
11.2.1. La vida política
Tal como corresponde a la obsesión de Galdós por los grandes hombres
y a las condiciones reales de la vida política en este momento de
nuestra Historia contemporánea, es constante el protagonismo de los líderes
políticos sobre los grupos, las ideologías, y las alianzas. Partiendo
de la visión dicotómica de Galdós, hay políticos intocables (Prim, Castelar,
Pi y Margal!) más por sus cualidades personales que por las estrictamente
políticas. Otros son absolutamente negativos (Paúl Angulo,
Romero Robledo) ejemplos de radicalismo y de oportunismo. Y personajes
como Suñer y Capdevila o Ramón Cela presentan una doble cara,
contrastando siempre una personalidad bondadosa con su postura política
radical.
, HINTERHiiusER. Hans. Los "Episodios Nacionales» de Benito Pérez Oaldós. Madrid. Gredos.
1963. pág. 28.
mi BIBLIOTECA GALDOSIANA
Estos políticos, reunidos en sus tertulias, clubs o en el mismo Congreso,
están absolutamente separados del pueblo, al que desconocen y
utilizan para su propia conveniencia.
El centro de la vida política es el Congreso. Un Congreso visto como
un espectáculo, con diversos actos. En el primer acto se ofrece una visión
positiva: "En las cortes hay una suma de inteligencia que no encontraremos
en ningún otro momento de la historia de España en este siglo"
4. Y en los siguientes ya es un "espectáculo de indescriptible confusión
que daban los padres de la patria", o según Tito "los alborotos del
divertido gallinero de mi patria" 5, en el cual los actores son siempre los
mismos: Castelar, Pi y Margall, Ruiz Zorrilla ...
11.2.2. El carlismo
A través de la quinta serie, el autor se muestra radicalmente contrario
al carlismo. Su crítica es absolutamente demoledora y abarca todos los
aspectos posibles. Su subjetivismo es tal que la opinión prevalece sobre
la reconstrucción histórica, de tal manera que el autor realiza, gradualmente,
un violento alegato contra el carlismo.
Así, ya desde España sin Rey, observamos que el lenguaje está plagado
de insultos (<<bestias negras», «carcundias", «trastos viejos", «abcesos
infecciosos», «el enemigo», «una aberración de cerebros enfermos»). Los
personajes carlistas, desde la semblanza de Don Carlos, hasta Romarate,
pasando por Doña Nieves o los jefes guerrilleros, son física y psicológicamente
negativos: trasnochados, violentos, oportunistas, incultos ... ,
cada uno de ellos presenta rasgos reprobables. La íntima relación entre
aspecto físico y catadura moral, una técnica muy galdosiana, prepara al
lector para el rechazo personal y, por ende, ideológico.
Este subjetivismo de Galdós se demuestra en la elección de los sucesos
históricos carlistas. Es definitoria la prolija enumeración de las violencias
carlistas (a recordar la toma de Cuenca) o de las características
de las partidas carlistas, "levantamiento general y a la menuda, en la
mayoria de los casos organizado y dirigido por indignos clérigos" 6.
Esta situación lleva a la guerra civil, el gran temor de Pérez Galdós.
Tito y Mari Clío conversan al respecto: la guerra es «infantil y sangrienta",
«impía", y su juicio histórico es que "Contiendas tan vanas y estúpidas
como las que vio y aguantó España en el siglo XIX, por ilusorios derechos
de familia y por unas briznas de Constitución, debieran figurar únicamente
en la historia de las riñas de gallos" 7.
Las consecuencias de las guerras no serán sólo nefastas por el sufrimiento
popular en un enfrentamiento fratricida, sino porque traerán
4 PÉREZ GALDÓS, B., España sin rey, op. cit., págs. 104 y 42.
5 PÉREZ GALDÓS, B., La primera República, Madrid, Alianza Hernando, 1980, pág. 96.
6 PÉREZ GALDÓS, B., España sin rey, op. ciL pág. 1.36.
7 PÉREZ GALDÓS, Bo, De Cartago a Sagunto, Madrid, Alianza Hernando, 1980, pág. 12l.
V CONGRESO GALDOSIANO B
como secuela la creación de un ejército sobredimensionado, ineficaz,
con una inflación de mandos que estimula su secular intervención en la
vida política 8.
. La postura crítica de Galdós se refiere también a la ideología. El carlismo
representa todo lo que él rechaza: clericalismo, tradicionalismo,
absolutismo, fanatismo, intolerancia, guerra ...
A pesar de esta implicación personal del autor en la cuestión carlista,
su interpretación histórica sobre el proceso se fundamenta en:
- La paradoja de que la revitalización del carlismo es deudora del régimen
de libertades extendido a partir de la Revolución del 68 y el proceso
de interinidad 9.
- La reducción a una sola causa, la dinástica, respecto a la explicación
del surgimiento del carlismo.
- La cansada reflexión, ya en Cánovas, de que liberales y carlistas no
oponían dos concepciones políticas e ideológicas antagónicas, sino ramas
de una misma dinastía, dos tronos. La Restauración será el triunfo
del sector más moderado de los liberales \o.
I1.2.3. Republicanos federalistas
En una primera lectura, la postura de Pérez Galdós respecto al republicanismo
es contradictoria. En Bspaña sin Rey, carlistas y federales son
un peligro para España, y tanto habla del "drama federal, tragedia breve»,
como del "sentimiento republicano, el más joven y, por tanto, el más
vigoroso» 11. En Bspaña Trágica los federales son un movimiento prematuro,
al que rechaza por la exaltación y demagogia de sus protagonistas
(paúl y Angulo). Pero también en este momento aparece, como una cuña,
la persona y el pensamiento político de Pi y Margall. A partir de La primera
República lamenta la división del republicanismo, mantiene el reconocimiento
a Pi y Margall, y deriva en una postura que refleja la ambivalencia
de su pensamiento: "Cuando esto empezó me agradaba la rebeldía
garbosa, el desprecio del gobierno central ( ... J. Pero ya se van desvaneciendo
mis ilusiones" 12.
También hay que constatar que, a diferencia del carlismo, la narración
de los hechos históricos es muy completa, no sólo en las sublevaciones
federalistas del año 1869, sino en la minuciosa reconstrucción de los
hechos del Cantón de Cartagena. Es la historia viva, la historia heroica
escrita por el pueblo.
Para clarificar la postura de Galdós, hemos de observar que: ataca al
republicanismo federal radical, tanto en sus personajes (a Paúl y Angulo
B PÉREZ GALDÓS, B.: Cánovas, Madrid, Alianza Hernando, 1980, pág. 8.3.
9 PÉREZ GALDÓS, B.: España sin rey, op. cit., págs. 16-17.
10 PÉREZ GALDÓS, B.: Cánovas, op. cit.. pág. 179.
11 PÉREZ GALDÓS, B.: España sin rey, op. cit.. pág. 186.
12 PÉREZ GALDÓS, B.: La primera República, op. cit., pág. 168.
_ BIBLIOTECA GALDOSIANA
le acusa del asesinato de Prim) como en sus actos (insurrecciones republicanas)
y su ideología (una ideología de ruptura que llevará, incluso, a
la destrucción de la historia) 13. Pero respeta la idea federal moderada,
inscrita en la valoración tan positiva de la figura de Pi y Margall -no olvidemos
la importancia de los grandes hombres en la visión histórica de
Galdós- y en la coincidencia en muchos aspectos de su ideario político
14. Ahora bien, la coincidencia no es totaL pues Galdós teme que la
idea federal puede romper la unidad de España.
Una postura ambivalente se refleja también en el movimiento cantonal.
La admiración del autor hacia el pueblo como protagonista de la
historia, el valor personaL la valentía colectiva, es manifiesta en los párrafos
dedicados al Cantón de Cartagena: "Tú, Tito, que has visto muchas
y grandes cosas y de ellas escribes, reconocerás que España no ha visto
un trozo de historia condensada como este nacimiento de nuestro cantón
... » 15.
Pero también se contrarresta con veladas acusaciones hacia la "vulgarización
de la república .. o, lo que es lo mismo, el miedo de un defensor
de la clase media ante el poder de convocatoria de las clases populares,
demostrado por el ideario republicano (supresión de las quintas, consumos,
etc.).
En conclusión, la República es, para Galdós, un ideaL propio del devenir
histórico. No ha sucedido en el tiempo adecuado. Esta I República
española es prematura 16.
11.2.4. Montpensieristas, amadeístas, alfonsinos
No olvidemos que los tres son representantes de una misma tendencia:
la monarquía, que nada nuevo puede ya aportar, y del liberalismo
"ibérico .. , tan falto de los ingredientes positivos que tendrá en otras zonas
de Europa, por ejemplo el inglés en su aspecto económico o el francés
en el político.
La tendencia montpensierista aparece únicamente en dos episodios,
España Trágica y España sin Rey, tal como corresponde a su carácter
coyuntural. Nos encontramos ante una imagen negativa, ya que Montpensier
"Pretende la corona y no ha podido alcanzar el acta de diputado" 17.
Su actuación política está mediatizada por el dinero, su riqueza le permite
comprar a políticos, pero no consigue la aceptación popular. El dinero
de Montpensier, según Galdós, apoya todas las conspiraciones, incluso
las federales. El personaje de Montpensier no aparece con entidad
hasta el momento del duelo, suceso que es aprovechado por Pérez Gal-
13 PÉREZ GAL06s, 5., &paña trágica, Madrid, Alianza Hernando, 1980, pág. 136.
14 PÉREZ GAL06s, 5., La primera República, op. cit., pág. 71.
15 Ibidem, pág. 135.
16 Ibidem, pág. 168.
17 PÉREZ GALD6s, 5., España trágica, op. cit., pág. 4l.
V CONGRESO GALDOSIANO _
dós para incidir en su debilidad y autodestrucción, caracterizando su falta
de habilidad política.
Respecto al reinado de Amadeo L la visión del autor no se aparta de
la actual. Amadeo I es un personaje respetado en cuanto a rey constitucionaL
excepto por la aristocracia y la capa más baja del pueblo, pero
la ausencia de Prim, su principal valedor, y de los otros líderes del 68
(Topete, Serrano) le dejará aislado ante la compleja realidad española,
e inoperante ante el resurgimiento de la problemática carlista y republicana.
La vuelta de la dinastía borbónica en la persona de Alfonso XII aparece
como una posibilidad ya en España sin Rey, una posibilidad que
podrá satisfacer los intereses de una burguesía enriquecida y las aspiraciones
cortesanas de una aristocracia relegada. La idea se extiende poco
a poco, a partir de los fracasos del resto de las opciones. Aparece en los
episodios como un movimiento social, espontáneo. Sobre este estado de
opinión favorable, Cánovas va construyendo lo que será el edificio político
de la Restauración.
La figura de Cánovas es la de un político hábil e inteligente que sabe
que su opción es embrionaria; deja actuar el tiempo y va controlando el
entramado político y social, insistiendo en sus contactos con la aristocracia:
"Nuestras catacumbas son doradas y cómodas: se está bien en
ellas ... Podemos esperar. .. 11 18.
I1.3. La cuestión social
Resulta dificil analizar la cuestión social a través de la quinta serie. La
complejidad radica en los cambios de enfoque, reflejo de las contradicciones
de un burgués que ve cómo su clase está perdiendo su oportunidad
histórica; un burgués que no conoce al pueblo, y por eso lo ama y
lo teme. Tampoco conoce a la aristocracia, pero mantiene hacia ella una
postura de desprecio, sin ambages.
Así, mientras se afirma el protagonismo de la clase media en este
periodo: "Este último tercio del siglo XIX es el tiempo de esta clase nuestra,
balancín entre la democracia y el antiguo régimen, eslabón que encadena
pobres con ricos, nobles con villanos y creyentes con incrédulosll,
el autor nos advierte del peligroso distanciamiento entre burguesía
y clases populares: "Yo amo al pueblo ... en principioll 19.
En Amadeo 1 resurge el pueblo, ya como un coro griego que asiste a
acontecimientos que suceden fuera de su alcance, ya como un elemento
estético o simpático, costumbrista: "Vámonos a la Fuente de la
Teja ... 1I 20.
18 PÉREZ GALDÓS, B., España sin rey, op. cit., pág. 124.
19 PÉREZ GALDóS, B., España trágica, op. cit., págs. 181-182, y 48.
20 PÉREZ GALDÓS, B., Amadeo I. Madrid, Alianza Hernando, 1980, pág. 97.
_ BIBLIOTECA GALDOSIANA
y siguiendo con este interés creciente en las clases populares, los dos
siguientes episodios presentan al pueblo como protagonista de la Historia.
No sabríamos discernir el famoso dilema teórico de Galdós, el intento
de conjugar Historia oficial e Historia interna 21. A episodios centrados
en la tlistoria oficial le siguen otros en los que predomina la tlistoria
anónima. O si, al contrario, acontecimientos como el cantonalismo sólo
se podían tratar desde la perspectiva de esa tlistoria interna, ya que, al
parecer, no existen personajes históricos que focalicen el interés de Galdós
en este período.
Hay que recordar que cuando se utilizan términos como "pueblo», se
diferencia entre "pueblo» cuando actúa con heroísmo, cuando se comporta
bien desde la perspectiva, burguesa, y "plebe» o "populacho" cuando
participa en disturbios, algaradas o hechos que no son del agrado del
autor 22.
Es significativo que Pérez Galdós olvide la presencia cada vez más
importante del proletariado industrial en esta época. Sólo a partir de
Cánovas aparecen menciones tales como "turbas gregarias despectivamente
llamadas masa obrera" 23, juicios verdaderamente representativos
de una mentalidad de clase media.
Su visión sobre la sociedad de la época se completa con vivas descripciones
del ascenso de la burguesía, su fácil enriquecimiento y ennoblecimiento,
proceso que culmina en la Restauración 24. La crítica a
estos aspectos del siglo XIX sólo tiene parangón con la que realiza a la
aristocracia.
11.4. La cuestión religiosa
El problema religioso es abordado con una terrible dureza. Ligado
estrechamente al carlismo, es un tema en el que Pérez Galdós no admite
ambigüedades. Su anticlericalismo recorre toda la obra de forma transversal.
Desde la Constitución del 69, a la que critica por "farisaica y
meticulosa" en la concesión de la libertad de cultos, hasta su satisfacción
por la expulsión de los Jesuitas, "máquina tenebrosa y fuerte, soldados
de una orden de caballería que unos creen de Dios, otros del diablo" 25.
Ataca fundamentalmente la intromisión de la Iglesia en la política, ya
sea desde el control ideológico que realiza el clero secular o regular,
ya criticando la intervención directa del Papado en los asuntos internos
de España 26.
21 HINTERHÁUSER, H .. op. cit .. págs. 103-115.
22 Ibídem, pág. 126.
23 PÉREZ GALDÓS, B., Cánovas. op. cit.. pág. 62.
24 Ibídem. pág. 62.
25 PÉREZ GALDÓS, B., España sin rey, op. cit .• págs. 76 y 18.
26 PÉREZ GALDÓS, B .. De Cartago a Sagunto. op. ciL págs. 56-57.
V CONGRESO GALDOSIANO mi
y, por fin, resaltar lo significativo del lenguaje. Los insultos y las descalificaciones
son continuas: "una piara de frailes inmundos y monjas
idiotas y puercas" 27.
El peligro del poder de la Iglesia Católica en nuestro país es tan grande
que llegará a controlar la única vía de mejora para el pueblo, según
el autor: la enseñanza.
III. CONCLUSIONES: ALGUNAS APRECIACIONES SOBRE GALDÓS y LA HISTORIA
En base al análisis realizado, intentaremos reflejar cuáles son los grandes
rasgos de la visión acerca de la Historia de Pérez Galdós.
En este sentido, una de las características que se observan en el transcurso
de la quinta serie es la explicación intencionaL fundamental en la
tarea de hacer Historia. Sin embargo, no hay que olvidar que las acciones
de los individuos y de los grupos se enmarcan en unas relaciones sociales
más complejas, estructurales si se quiere. De la explicación intencional
es más fácil llegar a juicios de valor, pero esto no implica que sean
más válidos que los que se hacen a partir de otro tipo de explicación que
considere también la relación dialéctica de factores estructurales.
Este proceso se observa claramente en los Episodios, plagados de
juicios de valor sobre personajes y acontecimientos, ya sea a través del
narrador, de las discusiones entre personajes, o de cada uno de los "alter
ego» de Pérez Galdós
El narrador, Galdós, está omnipresente o bien utiliza el recurso de la
mitología para crear una sensación de distanciamiento de los hechos, de
objetividad. La mitología es como un "alter ego» revestido de la impersonalidad
y autoridad que confieren los mitos. Es un recurso para solucionar
problemas técnicos: cuando le falta un nexo espacio-temporal surge
un personaje como Tito Liviano, con capacidad para trasladarse y romper
estructuras narrativas lineales; cuando quiere dar a conocer una reflexión,
fruto de su experiencia y de su conocimiento "a posteriori» de los
hechos tratados en ese momento, recurre a Mari Clío, la Historia, revestida
de sabiduría y capacidad crítica, ya que está en posesión de la verdad
histórica 28.
El rasgo primordial de su manera de hacer Historia es la explicación
unicausaL acompañada por el absoluto predominio de la historia política.
Cada hecho es explicable por una única causa, directa y simple, sin
tener en cuenta una variedad de factores interrelacionados (así, el carlismo
se debe a un problema dinástico; no interviene en su explicación ni
la cuestión foral ni la peculiaridad de su distribución geográfica, etc.).
27 Ibídem, pág. l 7.
28 Hinterhauser interpreta la figura de Mari Clío como un «síntoma de que Galdós consideraba
inútil seguir pensando en la Historia interna y en las posibilidades de exponerla
en la novela histórica". HINTERHAUSER, H.: op. cit., pág. 114.
_ BIBLIOTECA GALDOSIANA
Para Galdós la Historia seria una acumulación de datos políticos: sucesión
de gobiernos, de personajes políticos, disputas entre camarillas,
etc. De la vida política sólo le interesa lo que se desarrolla en las Cortes.
Sin duda, es en este tema donde la narrativa y la historicidad galdosiana
se unen más estrechamente: consigue transmitir con gran fuerza y viveza
la política real, la que se hace en los pasillos del Parlamento, la que
se debe a las relaciones personales, la que se aleja de las ideologías y
los programas. Así, Sagasta es amigo de sus rivales políticos, Cánovas se
relaciona con todo el espectro "institucional .. mientras prepara abiertamente
la vuelta de los Borbones, Prim dialoga cordialmente con los republican
os ...
Esta personalización de las ideas políticas y el subjetivismo antes
mencionado, lleva a Galdós a realizar un tratamiento maniqueo de los
procesos y los personajes históricos (Carlismo en oposición a la Revolución
Septembrina; Montpensier, Doña Nieves o Urríes contra Colau, 00-
rregaray ... ) .
También habría que hablar de la influencia de la evolución personal e
ideológica de Pérez Galdós como base de un cambio en el tratamiento
de sus novelas históricas. El Galdós que creía en el progreso a través de
la Historia se va convirtiendo poco a poco en una persona desengañada
que ya no confía en la providencia, sino que preve e un designio fatalista.
En esta evolución habría que situar algunas de las contradicciones y
carencias señaladas en esta quinta serie, que, de todas formas, no desvirtúan
el intento galdosiano de presentar una Historia viva, educativa,
que cumpla, en algún sentido, con el objetivo último de su intento regenerador:
educar al pueblo.