Taller didáctico Galdós según Tomás Morales. Casa-Museo Tomás Morales del 1 de febrero al 31 de marzo de 2008. El Taller se celebró en la Casa-Museo Tomás Mora- les de 9’00 a 13’00 duran- te los meses de Febrero y Marzo de 2008. Invitamos a participar en este taller a los alumnos de 2º ciclo de Secundaria y Bachille- rato —25 alumnos en ca- da grupo— por lo que, obviamente, el tratamien- to del taller y las activida- des realizadas se adapta- ron a las aptitudes y capa- cidades propias de cada grupo dependiendo de su edad y nivel académico. El número de alumnos asis- tentes al taller fue de 53. Su genio mezcló en un solo crisol las tres Unidades; prestóle el Verbo el apoyo de todas sus facultades; y el Sueño, carbón ardiente, verificó la fusión. El Arte daba la pauta con su instinto soberano; la Naturaleza, el vaho cálido, cordial y humano; y era la Verdad la síntesis final de su religión... TOMÁS MORALES PARA LA EDICIÓN DE 2008 del Día de las Letras Canarias, la Dirección General del Libro, Archivos y Bibliotecas propone que se celebre con la figura de Don Benito Pérez Galdós. El Departamento de Enseñanza y Acción Cultural de la Casa-Museo Tomás Morales se unió a esta celebración a través del taller didáctico Galdós según Tomás Morales cuyo objetivo principal es fomentar la lectura y el conocimiento de quien, en opinión general, es el mayor novelista español después de Cervantes. Conocimos pues al padre de la novela hispánica contemporánea, pero no a través de sus textos sino, a través del poema-homenaje que le dedica Tomás Morales a Galdós: “La ofrenda emocionada” publicado en el libro II de Las Rosas de Hércules (1919) y publicado en la sección del libro títulada “Epístolas, Elogios y Elogios fúnebres”. Es este un poema-homenaje donde Tomás Morales recrea la figura del novelista, comentando diversos aspectos de su biografía. A través del poema, Tomás Morales resume las tres grandes virtudes que caracterizan a la obra del novelista canario: el Arte, la Naturaleza y la Verdad. Y también los asistentes al taller conocieron la figura de Galdós a través del monumento que le realizó Victorio Macho y que se situó en el Parque del Retiro en Madrid el día 20 de enero de 1919. El alumnado que asistió al taller supo que dicho poema fue escrito por Tomás Morales con motivo del homenaje de esta escultura, a la que el escritor y crítico Enrique Díez-Canedo describiría con honda admiración, en una ocasión que visitó el estudio de Victorio 118 Macho: En el silencio del estudio, la estatua nos da otra lección de majestad; tranquila, homérica de expresión la cabeza augusta; inmóviles, unidas las manos, que ya hicieron su tarea. Un paño cubre las piernas; el traje de hoy, disimulando sus hechuras efímeras detrás de las líneas esenciales, viste para la eternidad la escultura. Si fuese ya de su tamaño, diríamos que el propio Galdós, ciego y mudo, iba siguiendo nuestra charla y aprobándola con su cabeza paternal. Estatua de Galdós, 1919 situdada en el Parque del Retiro en Madrid por VICTORIO MACHO en Monografía de Victorio Macho. Madrid: Espasa-Calpe, 1926 Casa-Museo Tomás Morales 119